Angel de la muerte

En cierta ocasión, el amo de una viña grande mandó a uno de sus mejores criados a realizar compras en la ciudad de Samaria. Llegado éste a la ciuda



En cierta ocasión, el amo de una viña grande mandó a uno de sus mejores criados a realizar compras en la ciudad de Samaria. Llegado éste a la ciudad se encontró cara a cara con otro ser que le quedó mirando fijamente. El criado se sintió profundamente turbado por aquella mirada penetrante del sujeto. Acto seguido, se dio media vuelta y regresó a toda carrera hasta la viña de su amo.

Llegando a la viña, tomó rápidamente un caballo y se subió en él. Entonces, el amo preocupado por aquella rara actitud de su criado le preguntó:

-¿Qué es lo que te pasa?

El criado respondió:

– Cuando llegué a Samaria me encontré con un sujeto vestido con una capa negra que me hizo una mirada penetrante que me turbó y ahora he decidido huir de este lugar e irme a Jerusalén.

Diciendo estas palabras se alejó de allí rápidamente.

Entonces, el amo se dirigió a Samaria en busca de ese sujeto vestido con capa negra y con una mirada penetrante y rara. Encontrándole, sentado en una plazoleta, el amo se acercó y le dijo:

– Oiga ¿Porqué Ud. asustó hoy día a mi criado con una mirada rara?

El sujeto le respondió:

– En honor a la verdad, señor, debo decirle que yo soy el ángel de la muerte y que no lo miré en forma rara. Lo que pasa es que me quedé admirado de haberle encontrado acá en Samaria siendo que esta noche yo tengo una cita con él en Jerusalén.

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