Baby Shower Biblico

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Baby Shower Bíblico:

Queremos que esta reunión, no sólo sea una fiesta del bebé, sino una gran ocasión, para recordarles que Dios los ha elegido a ustedes Dalila y Gustavo como padres y que este bebé que hoy es bienvenido, significa la presencia de Dios en su hogar.

Los apreciamos mucho, y nos regocijamos por este acontecimiento, a la vez, brindamos nuestro apoyo y pedimos a Dios gracias abundantes para su bebé y para su hogar.

Dalila:  La mujer es principio de vida en quien reside la fuerza creadora, durante nueve meses has alimentado a tu bebito, con tu propia sustancia se ha ido formando su cuerpo, ya lo ama desde antes de conocerlo, pronto lo tendrás a tu lado… entre tus brazos, cuando lo veas y toques por primera vez, le des Gracias a Dios. Tú le has dado el cuerpo, y Dios el alma; esa alma aun esta dormida, luego poco a poco ira despertando a la sombra de los cuidados y desvelos tuyos y de Gustavo.

Su primer deber es amarlo, ese amor debe ser heroico sacrificado durante toda su vida sin desfallecer ante sus obligaciones para con él, solamente así merecerán los nombres de PADRE y MADRE, recuerden que la Herencia de Dios son los hijos.

Tal vez se preguntarán por qué Dios les dio este hijo?
Pues porque…
–        Encontró mucho amor en ustedes
–         Vio la capacidad de ustedes no sólo para ser padres, sino buenos padres
–         Observó la paz que hay en su casa y que en muchos hogares se ha perdido,
–         Palpó la unidad familiar que manifiestan.
Por eso y mucho más les da la responsabilidad de recibir, cuidar, educar, guiar a su bebé a que sea un verdadero hijo de Dios.

Dalila y Gustavo:

A continuación queremos entregarles unos presentes que con todo cariño hemos preparado para ustedes y su bebito:

1.- Cobija
Esta cobija que representa el calor, no nada más corporal, el que transmites ya desde ahora a tu hijo, sino también ese calor que lo acompañará en cada momento de su vida, cuando lo mires, o lo acaricies, o escuches su voz, cuando se te necesite o tu lo necesites.

2- Silla – Cuna:
Representa los brazos, el apoyo de ustedes, sus padres, que lo protegerán y le ayudarán a crecer con amor y seguridad. Que cuando crezca los encuentre extendidos siempre que los necesite.

3- Estuche de Limpieza:
Contiene todo lo necesario para que cada día puedas asearlo y mantenerlo limpio, tranquilo y contento. Significa el cuidado que tú y tu esposo pondrán en su educación, para que esa limpieza externa sea un reflejo de todas las actitudes de su vida.

4 – Ropa:
Servirá para proteger su cuerpecito, que irás cubriendo de acuerdo a las diferentes épocas del año, y conforme vaya creciendo y aumentando de talla. Son como los Dones y las Gracias que recibirá en cada uno de los Sacramentos que celebre en las distintas etapas de su vida, y que irá haciéndolas crecer en la relación con ustedes, sus papás, con sus familiares y con sus amigos.

5 – Alimentos:
Nos recuerdan que nuestro organismo, desde pequeños, necesita una dosis diaria de calorías, proteínas, vitaminas, minerales, etc. Para tener fuerzas y estar activos, en una palabra, para vivir sanos. Desde pequeño, ustedes le enseñarán a su hijito que hay otro alimento tan indispensable como estos que mencionamos y que son para nutrir nuestra vida espiritual: La palabra de Dios y la Eucaristía.

6 -Familia:
Será para él, un reflejo de lo que sean ustedes, sus padres. Deseamos sinceramente que Gustavo y tú, a imagen de la familia de Nazareth, sepan ser para este bebé, así como para sus hermanos y amigos, imagen de Dios y alegres compañeros en el camino de la vida.

7 – SUETER O COBIJITA:
A tu bebe hay que mantenerlo abrigado por que ha estado acostumbrado a lo calido de tu seno, va a salir a la luz, a la intemperie, necesita seguir sintiendo calor. La mejor temperatura del bebé una vez que nace, es la de tus brazos amorosos, al igual que las plantas requieren para crecer de los calidos rayos del sol, que el amor tuyo y de Gustavo sea ese sol de tu hogar, sus rayos: la comprensión la bondad, la alegría el perdón; quieres que su cuerpo y su alma sean sanos pues ámense mucho.

8 – TALCO, JABONES Y COLONIA PARA BEBE:
Que bella es una alma inocente y pura, la pureza es la virtud de Cristo. Es el más hermoso tesoro que puede tener un niño, es la perla maravillosa de la juventud. Las almas puras dan el mejor «aroma a Cristo». Que sea primordial en ti, vela por la pureza de tu hijo vigílalo siempre sin que se sienta ser vigilado, cerciórate quienes son sus amigos, la nana, la televisión, recuerda que ella es destructora si no se sabe hacer buen uso y se convierte en abuso; desde pequeño hazle comprender que Dios siempre lo ve, que su cuerpo es templo de Dios, contesta a todas sus inquietudes con sencillez, cultívate para que lo hagas adecuadamente, y qué mejor ejemplo que el que nos da la Biblia la Palabra de Dios, que el mejor aroma que se respire en tu hogar sea el de tu pureza, la de Alex, la de tus hijos, pídelo sin cesar a Dios y lo conseguirás.

9 – PAÑALES:
Aquí tienes, pañales desechables que te harán más fácil la tarea de asear a tu bebé. Tu abuelita lavó los de tu mamá, tu mamá los tuyos, y a ti te toco mas confortable, mas simple en esa no muy agradable tarea; cuando asees a tu bebe y esto te incomode, ya sea que ocurra a media noche o en la pesadez de tu sueño, o que tengas que interrumpir la comida, etc. no vas a poder menos que sentirte contrariada, en esos momentos recuerda a tu abuelita a tu mamá, y en vez de enfadarte, da gracias a Dios y ofrece tu trabajo

10 – UNGUENTO O VASELINA Y ACEITE:
En la vida hay momentos de fricción y que producen rozaduras. Es lo natural en medio de pequeñeces cotidianas; entre hermanos, amiguitos tal vez con papá después de las correcciones, ten siempre a la mano el ungüento y el aceite del equilibrio la sonrisa mediadora, la atracción de tu bondad; esto es el mejor calmante para el ardor de las rozaduras. Un calido abrazo trae siempre de nuevo la paz.

11 – TOALLITAS HÚMEDAS:
Las toallitas húmedas son para mantener limpio a tu bebé, pero no sólo del cuerpo también de su espíritu. Haz de cuidar tu vocabulario y tus expresiones de enojo, y todo lo que pueda ser mal ejemplo para tu hijo; y cuando vaya creciendo, irás también limpiando sus malos pensamientos, las malas palabras y todo lo negativo que en el transcurso de su vida vaya adquiriendo, pues así estará siempre limpio de corazón para que pueda ver a Dios

12 – BIBERONES:
Tendrás que criar a tu hijo sano, y para eso se requiere una buena alimentación pero recuerda «No solo de pan vive el hombre sino de toda la palabra que viene de Dios» ilustra su entendimiento alimentando su alma con la instrucción divina, enséñale a cumplir con las obras de misericordia, enséñale a dar de lo que el tiene, juguetes, ropa, dulces, etc. en su nombre y desde pequeño que ame a Dios y a su prójimo; aliméntalo con la Palabra de Dios, desde pequeñito, en vez de cantarle canciones de cuna, cántale alabanzas a Dios que calmen su espíritu cuando se encuentre incómodo

13 – ZAPATITOS:
Estos primeros zapatitos son suaves, blandos por que los bebés aun no saben caminar. Tu lo llevaras en tus brazos, conforme vaya creciendo endurecerá sus zapatitos, después tendrá tenis, botas, todo lo adecuado al camino que vaya recorriendo. Una buena madre siempre debe vigilar los pasos de su hijo, cuidarlo y enseñarle el camino hacia Dios. Formar una recta y sensible conciencia atenta a escuchar la voz de Dios que brota del interior de su ser que lo inducirá a hacer el bien y evitar el mal, una conciencia bien formada por tu buen ejemplo hará que aun cuando tu faltes, él razonará con la verdad.

14 – SONAJAS:
Se alegre, se optimista, juega con tu hijo, desde pequeñito, es tan importante esto nunca pienses que es perder el tiempo si te pones a hacerle un barrilete u otra cosa, habrás dado un paso importante para ganarte su confianza, que es la libre, franca espontánea y cariñosa entrega de lo mas sagrado que poseemos en la intimidad del corazón.

15 – CURITAS Y ALGODÓN:
Con los primeros pasos empiezan las caídas, siempre habrá oídos que limpiar, un toquecito de merteolate que dar, aparte de ser madre tienes que ser su enfermera, quien lo enseñe a caminar; si cae, cúralo siempre con solicitud, y cuando lo veas caer ayúdalo a levantarse sin recriminar; hazlo a la manera de Jesús, con los brazos y el corazón abiertos. La imagen que le des de comprensión y perdón será la que el se forme de Dios.

16 – BABEROS:
Es muy importante enseñar buenos hábitos si lo acostumbras a traer su cuerpo y ropa limpia se acostumbrara a la limpieza, lo mismo para con el alma. Edúcale su carácter, para eso se requiere esfuerzo metódico desde la infancia. Con el temperamento se nace pero con el carácter se forja con la voluntad, no de lo que siente sino de lo que debe hacer, no le des todo lo que pida ni accedas a sus berrinches, recuerda «mano de hierro con guante de seda». Con el babero protegerás al bebé y al usarlo en tu hijo, recuerda que lo protegerás, pero no aprisionarás; lo vas a corregir, pero no lo dañarás. Debes de amarlo pero no sobreprotegerlo, para que siempre sea libre, como Dios lo ha creado