La tentación como una oportunidad para crecer

Por Daniel Bustamante.
Base bíblica: Stgo. 1:12 «Bienaventurado el varón que soporta la tentación; porque cuando haya resistido la prueba, recibirá la corona de vida, que Dios ha prometido a los que le aman»
Introducción:
Cada tentación es una oportunidad para hacer el bien. Para ser bienaventurados. En el camino hacia la madurez ,  la tentación  se convierte en una alternativa para el crecimiento espiritual.
La tentación proporciona una elección. Aunque es el arma principal de Satanás para destruirte, Dios quiere usarla para tu desarrollo.
Cada vez que escoges hacer lo bueno en lugar de pecar, estas madurando en el carácter de Cristo.



Desarrollo:
En el libro de (Génesis 3:1) presenta al tentador disfrazado de uno de los animales más astutos. La palabra  hebrea usada para  serpiente (nahash) contiene la idea de una astucia excepcional.
El apóstol Pablo en el N.T. nos advierte que Satanás, se puede disfrazar como ángel de luz para tentarnos. (2 Cor. 11:14).
Las tentaciones son cada vez mas sutiles y se adaptan a los tiempos en el que vivimos.

¿Por qué Satanás nos tienta? La tentación,  es una invitación exclusiva de Satanás para entregarnos a un  estilo de vida  en rebeldía con Dios. En cambio Dios, no tienta a nadie (Stg.1:13). Satanás tentó a Eva (Gén.3:1-6 )  y logró que pecara. Desde entonces, se mantiene ocupado tratando de conseguir que la gente peque.  Incluso tentó a Jesús (Mat.4:1-3), pero Jesús no pecó.

Para entender sobre la tentación según Rick Warren: Primero debemos  identificar las cualidades del carácter de Jesús.
Una de las descripciones más concisas de su carácter es el fruto del Espíritu según (Gál. 5:22-23).
Estas nueve cualidades  parecen describir un retrato de Jesús. El es perfecto amor, gozo, paz, paciencia, y todos las otras cualidades del Fruto del Espíritu, incorporados a la misma Persona: Jesucristo.
Tener el Fruto del Espíritu es ser como Cristo.

¿Cómo, entonces, produce el Espíritu Santo estos nueve frutos en tu vida?
¿Los crea al instante en el momento de la conversión? NO.
El día que aceptamos a Cristo como nuestro Salvador, nacemos espiritualmente de nuevo, pero como toda criatura, necesitamos desarrollarnos, crecer, alimentar-nos y vivir en sociedad.  En tanto la materia básica del Espíritu de Dios esta latente en cada cristiano recién convertido. Es allí donde comienza un proceso, lento para algunos,  rápido para otros. Según el estímulo que tengamos para crecer.

El Desarrollo del carácter cristiano, siempre involucra una elección, y la tentación proporciona esa oportunidad. Por ejemplo:  Dios nos enseña a practicar el fruto del  amar poniéndonos a personas desagradables a nuestro alrededor. No requerimos fuerza de voluntad para amar a  la gente  que  es simpática y tolerante  con nosotros.

Dios nos enseña el verdadero gozo en medio de la tristeza. La felicidad depende de las circunstancias externas, pero el gozo esta basado en nuestra relación con Dios.

Dios desarrolla la paz verdadera dentro de nosotros, no haciendo que las cosas  se encaucen como quisiéramos. Cualquiera puede tener paz cuando todo sale bien, somos prosperados económicamente, tenemos un trabajo estable,  nuestra familia esta transitando los mejores momentos, o cuando disfrutamos de un hermoso paisaje en  nuestras vacaciones. Pero  la paz verdadera es cuando escogemos confiar en Dios a pesar de las circunstancias adversas.

De igual manera la paciencia se desarrolla en las circunstancias que nos obligan a esperar.

Dios utiliza la situación opuesta a cada fruto del Espíritu Santo para que tengamos la posibilidad de elegir.
No puedes decir que eres bueno,  si nunca has tenido la oportunidad de ser tentado a ser malo.
No puedes decir que eres fiel, sino has tenido la oportunidad de ser infiel.
La integridad personal se construye derrotando la tentación.

Como opera la tentación:
Necesitamos saber que Satanás es un enemigo astuto y predecible. El ha usado la misma estrategia y las viejas artimañas desde la Creación.
Todas las tentaciones siguen el mismo modelo.
La Biblia nos enseña que la tentación sigue un  proceso de cuatro pasos, los mismos  que Satanás usó tanto con Adán,  Eva  y como con Jesús.

Primer paso, Satanás identifica un deseo dentro de ti.
La tentación comienza cuando eres seducido a hacer lo malo o que se cumpla un deseo legitimo de una manera equivocada.
Al igual que Eva, a menudo tenemos una meta muy valiosa (aún dentro la Iglesia,  pero tratamos de alcanzarla de un modo equivocado).
Tan pronto cuando comenzamos a sacar a Dios de nuestros planes, nos estamos colocando nosotros mismos por encima de ÉL, esto es lo que Satanás pretende que hagamos.
La tentación siempre comienza dentro de nosotros, en la mente (Mc. 7:21-23).

Segundo paso, la duda, el tentador,  trata de conseguir que dudes de lo que Dios ha dicho sobre el pecado.
¿Es verdad  que Dios ha dicho eso? ¿No será que Dios ha dado esa prohibición para otra  persona o para otra época? ¿Acaso Dios no quiere que yo sea feliz? La Biblia  nos advierte en (Heb. 3:12).

Tercer paso es el engaño, Satanás es capaz de todo, menos de  decir la verdad, la Biblia lo llama el Padre de mentiras. Cualquier cosa que venga del el, será falsa o simplemente será una verdad a media.

El cuarto paso es la desobediencia. Lo que comenzó con una idea, se convierte en conducta pecaminosa o delictiva (Stgo. 1:13-14.)

Como vencer la tentación:
Entender que no es un pecado ser tentado .
La tentación se convierte en pecado cuando cedemos  a ella.
Hay una diferencia entre deseo y lujuria:
El deseo es una respuesta natural y espontanea de nuestro organismo, mientras que lujuria es un acto deliberado de la voluntad. La lujuria es la opción de cometer en tu mente lo que gustaría hacer con tu cuerpo.
Puedes sentirte atraído o incluso excitado cuando las hormonas de tu cuerpo se activan, pero sin embargo podemos decidir no pecar con lujuria.

Debemos reconocer lo que nos tienta para prepararnos.
Ciertas situaciones nos hacen más vulnerables que otras ante la tentación.
Satanás las conoce con toda seguridad:

Estas situaciones son particulares para tus debilidades y necesitas identificarlas. Cada persona tiene su propio árbol de la tentación.

Debes Preguntarte: ¿Cuando me siento mas tentado? ¿Que día  de la semana? ¿A que hora del día?

Otra pregunta: ¿Donde me siento mas tentado?  ¿En el trabajo? ¿En la Escuela,  en la Universidad? ¿En algún lugar de tu casa ?, ¿En la ciudad o fuera de ella?

Otra pregunta: ¿Quien esta conmigo cuando soy más  tentado? ¿Con un amigo/a, o  en la muchedumbre de inconversos o cuando estoy solo?.

También debes preguntarte: ¿Cómo me siento por lo general cuando soy mas tentado?
¿Puede ser cuando estas cansado, solo, aburrido,  deprimido o estresado?
¿Puede ser cuando te sientes que te han lastimado, o después de un éxito espiritual?

Eva fue tentada en soledad. Adán en el seno del matrimonio. Moisés en el éxito del liderazgo espiritual. Salomón en el sexo lujurioso y promiscuo. Pedro en su autosuficiencia y Sansón a pesar de los  poderes especiales,  en una mala elección por no esperar en Dios. Todos estos,  son algunos de los ejemplos que se pueden mencionar dentro del pueblo de Dios.

Debes indentificar tu punto débil y particular de tentación y luego prepararte para evitar esas situaciones tanto como sea posible.
Pídele ayuda a Dios.
En el cielo hay siempre una línea de emergencia que dice así:
«Invócame en el día de la angustia te librare y tu me honraras.» Sal. 50:15 otra esta en Heb.4:15-16
El amor de Dios es eterno y su paciencia es sobrenatural.
Si tienes que clamar doscientas veces al día  para derrotar cierta tentación en particular, él estará mas que dispuesto a  ayudarte.

Conclusión:
Las tentaciones nos mantienen dependiendo constantemente de Dios.
Cada vez que resistes la tentación te pareces mas a Jesús.

Agradecimiento Personal:
Quiero mencionar al Libro «Una vida con Propósito» de Rick Warren como una herramienta para esta meditación y para mi vida personal.

IGLESIA CRISTIANA EVANGELICA DEL CENTRO.
COMODORO RIVADAVIA – CHUBUT
ARGENTINA- SUDAMERICA.
danielbustamante@uolsinectis.com.ar


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